El Lenguaje de las cosas

The phrase „become environment“ has been written on a wall of the Odeon exhibition space by scraping the surface with a junk object from the streets of Bogota, those emphasizing the relationship between urban environment and language. The sounds generated by scraping/writing on the walls is the main element of the work. The writing does not necessarily have to be legible. The friction sounds generated by the writing replace the reading voice.

Both the wall and the junk object were connected to contact microphones that captured the sounds produced by the friction of both. The action was documented on video and audio becoming part of the documentation of the work. Once the action is finished, the junk object was left leaning against the wall and the recorded sounds were played back into the room.

>Process Spanish<

Identidad y contexto

Sobre la relación entre hombre y naturaleza

Actualmente la modernidad ha establecido un modelo de relación entre hombre y naturaleza como términos opuestos. Esto es conocido por el famoso dualismo naturaleza – cultura. Se trata de un concepto mecanicista de la naturaleza del cual Descartes (el llamado padre del racionalismo) fue su ideólogo. Este concepto se ha arraigado en la forma universal de entender al mundo a lo largo de los últimos 4 siglos. El Racionalismo se basa en las matemáticas clásicas y en conceptos de mecánica para describir al mundo y los organismos que lo pueblan, ignorando procesos mucho mas complejos sin explicación entonces y aún no muy entendidos (como son los sistemas de crecimiento y reproducción: Genesis).1 Nuestro sistema económico mundial depende y abraza hoy mas que nunca esta comprensión mecanicista de la naturaleza. Debido a las crisis actuales, como el cambio climático y sus consecuencias económicas, sanitarias y ecológicas, se ve la necesidad de tomar distancia de esta visión antropocéntrica del mundo y crear una visión en lo posible „neutral”. Así surge lo que hoy denominamos post-humanismo. Filósofos como Spinoza, Marcuse están siendo discutidos y releídos. Un filósofo francés que ha estado pensando en este sentido desde los años 90 es Bruno Latour (Parlamento de las cosas). El hombre es visto aquí como parte de la naturaleza y no como su opuesto. La cultura sería entonces parte de la naturaleza y por consiguiente, todo lo que el hombre hace también.

En base a esto, y teniendo en cuenta los conceptos mas inclusivos de naturaleza y cultura, en el trabajo elaborado durante el laboratorio FESE reflexiono y busco una definición apropiada de lo que llamamos identidad en relación con entorno y de qué forma puede ser el sonido un elemento que los amalgame.

Tras haber investigado sobre la relación medioambiente – palabra – cultura que se observan en culturas como la Wayuu y cómo esta se relaciona intrínsecamente con la creación del mundo, se me ocurre indispensable abordar la palabra misma (pütchikalü, en idioma Wayuu) cómo núcleo creador de identidad y también de contexto (en el sentido que Humberto Maturana le dá al lenguaje).

Trasfondo teórico

„Ya en la década de 1960 sociólogos, pero especialmente antropólogos y geógrafos sociales han reconocido el papel del entorno en la constitución de la identidad. Sin embargo, lugares como el hogar, la zona residencial o la ciudad han sido científicamente muy descuidados en su significado psicológico para la identidad, ignorando a Georg Simmel que ya en 1903 había descrito el fenómeno en su obra sobre el comportamiento y la experiencia del habitante de la ciudad. Tuvieron que pasar casi otros 60 años antes de que se investigara mas sistemáticamente la importancia psicológica del entorno espacial y los fenómenos de su conexión con la identidad y el yo de una persona.

Lugares como símbolos del yo: En The urban villagers, Herbert Gans describió cómo en la „re-urbanización” de distritos urbanos los planificadores destruyen sin saberlo la cohesión social y, por tanto, la “identidad territorial” de los residentes de dichos distritos.

En este contexto, el estudio de Herbert Gans (1962) ya mostró cómo residentes reasentados perdieron la oportunidad de cultivar su identidad. Las consecuencias negativas de este desarraigo provocaron problemas de salud y patologías entre estos habitantes. Además, con la pérdida de “identidad territorial“ aumentaron la delincuencia juvenil y las dificultades escolares, la delincuencia y el alcoholismo y el suicidio.

Las reacciones de duelo o de estrés en forma de nostalgia y problemas de salud se documentan como consecuencias psicosociales.“ 2

En este fragmento de Urs Fuhrer se nos revelan con claridad procesos de desarraigo del entorno que se pueden observar tanto en las zonas urbanas como en zonas campestres. Desde mi punto de vista esa intervención física sobre el espacio construido prosigue a una conceptualización geométrica del espacio que surge de la base racional y mecanicista del mundo promovida por el lenguaje. Es decir, se puede descontextualizar a una población sin necesidad de moverla de sito, sino atravez del lenguaje, redefiniendo su entorno.

En resumen; trabajar en un lenguaje mas inclusivo de todas las formas (vivientes o las llamadas inertes) que coexisten en nuestra realidad cotidiana significa construir und entorno mas sano y una identidad mas estable.

La palabra como trazo del entorno

La escritura es el dibujo mas colmado de significado. Una palabra escrita es silenciosa pero la escritura en sí no lo es. Escribir produce sonidos secundarios a los contenidos del texto; el sonido del teclado del computador, el sonido del lápiz sobre el papel en todas sus cualidades y combinaciones, etc. El sonido de la escritura no se considera sonido del lenguaje. Muy diferente a la voz que lee lo escrito, el sonido de la escritura hace evidente a los materiales que se frotan para dibujar las letras. Ese sonido es el que me interesa en cuanto es el sonido que amalgama la superficie del espacio que rodea al texto, el instrumento/objeto que se utilizó para escribirlo y su interacción con el espacio y el significado escrito; es decir la expresión cultural.

Entonces, qué sucede si en vez de escribir en y con medios convencionales se usan como medios objetos ya cargados de significado. El espacio arquitectónico mismo puede ser empleado como soporte y algún desecho industrial podría usarse como „lapiz“. El sonido que producen estos dos elementos al frotarse expresa su naturaleza física y la posición simbólica (e histórica, si se quiere) que ocupan en una cultura.

Hasta llegar a nuestros oídos el sonido primero toma un recorrido múltiple, refractándose en las superficies que hacen al espacio que lo rodea y transportando todas esas materialidades mas la materialidad de su fuente. Un sonido es siempre su entorno; lo transporta y lo amalgama. El sonido es el lenguaje de las cosas. A travez del sonido nos unimos a las cosas y estas se unen a nosotros en un espacie de dialogo ininterrumpido. Así es que tomar una identidad, pertenecer, sentirse parte, así también como la simple escucha, es hacerse entorno.

Instalación y acción performativa

Las frase „hacerse entorno“ se escribirá en una pared del espacio expositivo Odeón mediante el raspado de la superficie con un objetos chatarra de las calles de Bogotá haciendo hincapié en la relación „entorno urbano <–> lenguaje“. Los sonidos generados por el raspado/escritura en las paredes serán el elemento principal de la obra. La escritura no tiene necesariamente que ser legible. Los sonidos de fricción generados por la escritura reemplazarían a la voz.

Tanto la pared como el objeto chatarra estarán conectados a microfonía de contacto que hará posible la toma y grabación de los sonidos producidos por la fricción de ambos. La acción se documentará en video y este será parte de la documentación de la obra. Unas vez finalizada la acción, el objeto chatarra se dejará apoyado contra la pared y los sonidos grabados se reproducirán en la sala en forma de loop.

1. Vease: The Machine conception of the organism in development and evolution: A critical analysis, Daniel J. Nicholson,
2. Selbst, Identität und Raumbezug (auf der Grundlage eines Aufsatzes von Urs Fuhrer für die Enzyklopädie Um-weltpsychologie, 2008)

El lenguaje de las cosas

Instalación sonora y acción performativaUn trozo de chatarra, 2 micrófonos de contacto, 1 grabador y reproductor digital, 1 mezcladora, 2 altoparlantes activos – Mario Asef 2020

Festival Estación Sonora Experimental
FESE 2020

Puerto Contemporáneo: Espacio Alternativo para las Artes
Bogotá, Colombia

Acción: Sergio Jimenez , cámara: Jimmy Morales
El Lenguaje de las Cosas, installation view
El Lenguaje de las Cosas, installation view
El Lenguaje de las Cosas, Detail
El Lenguaje de las Cosas, installation view
El Lenguaje de las Cosas, Detail

Photographies © Zoila Silena Arias

Acousmatic Lectures


Errant Sound
an ongoing lecture series

The Acousmatic Lectures have roots in discursive practices and propose a listening experience based on the Pythagorean acousmatic model: a mode of presentation in which the speaker is hidden from the public. Acousmatic Lectures encourage both orator and listener to focus exclusively on the acoustic space that provides a frame for the spoken word, its temperament and tone, without the addition of visual information or the speaker’s body language. For this series of lectures, all visual clues generated by the speaker’s facial and bodily expressions (which normally influence how information is received) remain hidden. Nevertheless, the speaker’s voice and its dissemination in the surrounding environment still convey the speaker’s physical presence. This approach underscores the dialectical conflict between abstract and sensorial information, confronting us with an array of decisions specific to the act of listening itself.

Acousmatic Lectures –view–

The term references a Pythagorean tradition according to which only Pythagoras’s most devoted students were allowed to see and visually perceive him during his lectures. By contrast, newcomers were made to sit before a curtain concealing the master’s physiognomy. Students were therefore left without any visual information and had to try to follow the lectures solely by attentive listening.

The lectures are academic in nature—a deliberate choice of the artist. The speakers are academics and scholars who talk about their specific areas of expertise. The intention is to observe what impacts the acousmatic settings have on participants, and specifically without the influence of any artistic or aesthetic sensory effects. In the Acousmatic Lectures held thus far, a performative character has been observed that condenses the classic academic lecture scenario into an acoustic experience that functions both informatively—on a linguistic level—as well as in an acoustically qualitative way—on the level of the voice as instrument—and is capable of transforming situations, content, and space. These aspects are made legible through the ways in which the acoustic characteristics of the voice interact with the surrounding space. As such, they might be experienced as a means for determining the interaction between and transfer of linguistic and affective sensory information.

Poster symposium – Akusmatik als Labor

Lecturers: Alex Arteaga, Sabeth Buchmann, Ernesto Estrella, Markus Gabriel, Marcus Gammel, Federico Geller, Mladen Dolar, Deniza Popova, Hans-Jörg Rheinberger, Nihad Sirees, Birgit Schneider, Sven Spieker, a.o.

Listen to the Acousmatic Lectures online visit the official page >

Interview für w/k Zwischen Wissenschaft & Kunst – Online-Journal (German)

or download PDF here

Alex Arteaga, Acousmatic Lecture rehearsal 2017

Mario Asef: Kunst und Ökologie

Ein Gespräch mit Peter Tepe und Till Bödeker | Bereich: Interviews

Übersicht: In Teil II des Interviews (zurück zu Teil I) werden drei Kunstprojekte Mario Asefs vorgestellt, die unterschiedliche Bezüge zur Ökologie haben: Konsum der Landschaft, Der Pyramidenbau zu Raddusch und Kemmuna Nation. Asef ist ein wissenschaftsbezogen arbeitender Künstler, der in einigen Fällen auch mit Wissenschaftlern kooperiert.

Mario Asef, beschreiben Sie bitte, ehe wir Ihr künstlerisches Konzept herauszuarbeiten versuchen, das Projekt Konsum der Landschaft.
Es ist 2015 auf Einladung der Kuratorin Petra Schröck im Rahmen der Aquamediale 11 entstanden – im Spreewald, genauer gesagt in Lübben. Im Lübbener Schloss, einer zentralen Attraktion der Stadt, befindet sich im Erdgeschoss und mit einer Terrasse zum Schlossgarten ein Restaurant, das mit der Schokoladenmanufaktur Edelmond Chocolatiers verbunden ist. Wenn man eintritt, wird man zunächst mit einer alten Trommel konfrontiert, die früher zum Zermahlen von Kakaobohnen diente. Für das Projekt fungiert sie als Vitrine. Darin sieht man einen Kuchen, neben dem die Bezeichnung Geologischer Kuchen steht. Diesen entwickelte ich in Zusammenarbeit mit der Firma Edelmond Chocolatiers.

Mario Asef: Geologischer Kuchen (2015). Foto: Mario Asef.

Die Bedienung gibt dem Besucher eine Zeichnung, aus der hervorgeht, dass der Kuchen die geologische Struktur des Lausitzer Bodens darstellt: Zuckerguss, Vanilleteig, Schokoladenteig und Marzipan entsprechen Sand, Moräne, Braunkohle und Eisenhydroxid. Man bestellt vielleicht ein Stück Kuchen und setzt sich mit der Zeichnung auf die Terrasse.

Im Schlossgarten sieht man dann etwas, das, weil es z.B. mehrere Erdhaufen gibt, eine Baustelle sein könnte. Nähert man sich weiter an, so entsteht der Eindruck, dass es sich um eine Produktion von Ziegeln für den Bau handelt. Eimer, Schaufeln, Schablonen liegen herum, und man fragt sich vielleicht, was für ein lehmartiges Material hier verarbeitet wird. Auf einer Infotafel ist zu lesen, dass es sich um Eisenhydroxid aus der Spree handelt – dem entspricht im Geologischen Kuchen das Marzipan.

Mario Asef: Baustein-Produktion (2015). Foto: Mario Asef.
Mario Asef: Baustein-Produktion (2015). Foto: Mario Asef.

Ihre Beschreibung lässt erahnen, dass Sie sich am Beispiel der Spree künstlerisch mit einem Umweltproblem, einem ökologischen Problem beschäftigen – mit den negativen Folgen des Kohleabbaus. Erläutern Sie bitte diesen Zusammenhang.
Der jahrzehntelange Kohlenabbau in der Lausitz, die der Spreewaldregion entspricht, hat unter anderem dazu geführt, dass sich Eisenhydroxid aus dem Boden löst und das Spreewasser in unterschiedlich intensiven Ockerfarben färbt. Fachleute sprechen hier von der Braunen Spree.

Fische, Pflanzen und Mikroorganismen sterben ab. Täglich fließen etwa 8,5 Tonnen Eisenhydroxidschlamm (Ockerschlamm) in die Spree, wobei noch nicht klar ist, wie sich die Umweltschäden auf den Tourismus auswirken. Die Region stellt sich als ökologisch und naturfreundlich dar und macht entsprechende Angebote für den Tourismus, etwa das Biosphärenreservat Spreewald. Es besteht also die Gefahr, dass die natürliche Grundlage des Tourismus in der Region wegbricht. Fischerei, insbesondere Angelfischerei sowie die Landwirtschaft sind im Spreewald und an der Spree gefährdet. In einer täglichen Sisyphusarbeit reinigen Bagger die Gewässer, während sich das Material ungenutzt an deren Rändern ansammelt.

Konsum der Landschaft kann somit als ein ökologisches Kunstprojekt verstanden werden: Mit spezifischen künstlerischen Mitteln machen Sie auf durch den Kohlebergbau entstandene Umweltschäden aufmerksam – mit dem Ziel, zu einem Umdenken speziell vor Ort wie auch im Allgemeinen beizutragen.
Das trifft zu. Mit Konsum der Landschaft möchte ich auf unsere Beziehung zur Natur aufmerksam machen, die sich von der Seite des Menschen her ausbeuterisch gestaltet.

Ich komme noch einmal auf den Geologischen Kuchen zurück: Wie verhält sich der Konsum der Landschaft zum Genuss eines Kuchens? Sind Genuss und Konsum für Sie gleichbedeutend?
Nein. Man kann etwas auch z.B. aus Gier konsumieren. Meine Fragen sind: Wie viel kostet mein Genuss? Auf wessen Kosten wird unser Lebensstandard aufrechterhalten?

Welche besonderen Akzente setzen Sie hinsichtlich der Beziehung zur Natur?
Zu meinem Kunstprojekt gehört die über den Bereich der Kunst hinausweisende Idee, dass es möglich ist, die großen Mengen an Eisenhydroxidschlamm wirtschaftlich zu nutzen. Der Ockerschlamm stellt ein Problem dar, solange man keine sinnvolle Verwendung für ihn findet. Ich schlage konkret vor, mit dem ockerfarbenen Schlamm Bausteine zu produzieren. Ich nutzte – was für den Besucher nicht auf den ersten Blick erkennbar ist – einen Teil des Schlossparks, um meine eigene Bausteinproduktion zu gründen. Ich mischte vor Ort Ockerschlamm mit Zement für die Produktion von Bausteinen und testete die Resultate für die nachhaltige Nutzung im Baubereich.

Begnügen Sie sich damit, beispielhaft zu zeigen, wie man den durch den Kohleabbau entstandenen Schlamm wirtschaftlich nutzen könnte, oder streben Sie an, sich an einer Produktion von Bausteinen aus Eisenockerschlamm selbst zu beteiligen?
Meine Absicht war, erstmal loszulegen und die Aufmerksamkeit der Leute zu erreichen. Ich hatte Ockerschlamm aus drei Orten bestellt, und ich mischte ihn in unterschiedlichen Proportionen – mit teilweise guten Resultaten. Damals hatte ich noch keine wissenschaftlichen Kooperationspartner, die mir bei der Untersuchung des Materials und der Proben helfen konnten. Meine Hauptbeschäftigung war, mit interessierten Besucher*innen über die Folgen des Kohleabbaus zu sprechen, denen das Material zu zeigen und ihnen meine Nutzungsidee zu erläutern. Auch Politiker wurden auf das Projekt aufmerksam und zeigten sich interessiert.

Zur Strategie, die ich in diesem Projekt anwende, gehört aber auch eine ironische Komponente: Einerseits will ich Denkanstöße für eine praktische Bewältigung bestimmter Umweltprobleme geben, andererseits sehe ich hier die Gefahr eines Teufelskreises: Man versucht, Probleme, welche die Wirtschaft, speziell die Industrie geschaffen hat, mit wirtschaftlichen Mitteln zu bewältigen – und das bringt wiederum neue Probleme hervor. Ich setze nicht alles daran, die Kunst für die Wirtschaft attraktiv zu machen. Es geht mir nicht primär darum, dass die Wirtschaft in eine solche Kunst investiert und die Politik dabei mitzieht.

Ihre künstlerische Position ist bei Konsum der Landschaft somit die folgende: Zum einen wollen Sie beispielhaft demonstrieren, dass der Ockerschlamm nicht zwangsläufig als zu entsorgender Müll betrachtet werden muss, sondern einer sinnvollen Verwendung zugeführt werden kann; zum anderen haben Sie Reserven dagegen, ausschließlich auf die Karte „Wirtschaftliche Nutzung der Nebenfolgen des Kohleabbaus“ zu setzen.
Das ist korrekt. Letzteres würde schief gehen. Meine Kunst will auf Probleme aufmerksam machen und Denkanstöße geben, aber nicht primär praktische Lösungen ökologischer und wirtschaftlicher Art entwickeln. Denn das Problem ist viel tiefgreifender als nur eine industriell-kapitalistische Form der Energieproduktion. Wir sollten in erster Linie unsere Konzeption von Land und Landschaft ändern – das bloße Konsumieren des Landes überwinden.

Hat es persönliche Kontakte zu Wissenschaftlern gegeben, die dazu beigetragen haben, dass Sie zu der beschriebenen künstlerischen und zugleich wirtschaftlichen Vorgehensweise gelangt sind?
Eine Kooperation mit Wissenschaftlern fand erst beim Folgeprojekt Der Pyramidenbau von Raddusch statt. Über den Tourismusverein Raddusch entstand eine Zusammenarbeit mit dem Biosphärenreservat und dem Fachgebiet Baustoffe und Bauchemie der Brandenburgischen Technischen Universität (BTU). Diese verfügt über ein gut ausgestattetes Labor, in dem das Eisenhydroxid auf seine Bestandteile hin untersucht wurde. Es ergab sich, dass der Ockerschlamm bis zu 80% aus Wasser besteht; hinzu kommt ein kleiner, aber nicht unwichtiger Anteil an Sulfaten (die den Schlamm unter bestimmten Bedingungen giftig machen). Resultat: Um den Ockerschlamm als Baumaterial verwenden zu können, muss die enorme Menge an Wasser zu beseitigt werden.

Auch bezogen auf den Pyramidenbau würde ich gern mit einer Beschreibung beginnen. Was bekommt der Besucher zu sehen?
Gar nichts, denn die geplante Pyramide wurde nie gebaut.

Mario Asef: Bautafel (2017). Foto: Peter Becker.
Mario Asef: Bautafel (2017). Foto: Peter Becker.

Dann wenden wir uns gleich der Vorgeschichte und dem Konzept zu.
Der Tourismusverein Raddusch bot mir 2016 an, in Raddusch an Konsum der Landschaft anzuknüpfen. Ich schlug vor, als Sinnbild für die gigantische ökologische Katastrophe eine Pyramide zu bauen; das wurde akzeptiert.

Weshalb betrachten Sie eine Pyramide als ein solches Sinnbild?
Die Frage, warum der Geschichte des Braunkohleabbaus in Raddusch ein Denkmal in Form einer Pyramide gesetzt werden soll, lässt sich in dreifacher Weise beantworten. Ein erster Grund ist der lokale Bezug zur altägyptischen Baukultur, den die Region um Cottbus seit der Orient-Begeisterung des berühmten Fürsten Pückler unterhält. Er entdeckte 1837 im Rahmen seiner Ägyptenreise die Pyramidenform für sich und beschloss, ein entsprechendes Bauwerk in Auftrag zu geben. In seinem Garten erbaut (heute ist hier der Fürst-Pückler-Park Branitz angelegt), wurde das Monument nicht nur zur letzten Ruhestätte des Fürsten und seiner Frau, sondern auch zum Wahrzeichen der Stadt.

Einen zweiten Aspekt stellt meine fortlaufende Beschäftigung mit architekturtheoretischen und archäologischen Fragen dar, welche meine künstlerischen Arbeiten begleitet. Im Jahr 2000 fing ich an, nach Definitionen der Architektur zu suchen. Damals grub ich im Rahmen der Arbeit Sleeping Policeman and Hole eine Vertiefung auf dem Gebiet des US-Militärflughafens in Heidelberg und häufte die Erde zu einem Hügel an (siehe https://marioasef.wordpress.com/2019/05/09/empirien/). Inspiriert war die Idee von den Nestbauarbeiten der Ameisenfamilie Atta Vollenweideri (der Blattschneiderameise aus Chaco, Argentinien). Beim Graben unterirdischer Tunnel sammeln die Ameisen Erde an, die sie überirdisch zum Bau einer pyramidalen Form als Eingang verwenden. Das Volumen dieser geschichteten Erde entspricht also dem negativen Volumen der ausgegrabenen Tunnel. Architektur lässt sich somit auch als Dialektik von Graben und Anhäufen/Bauen beschreiben. Daraus leitet sich der dritte Ansatzpunkt ab, denn typische Grafiken, die der visuellen Veranschaulichung des Tagebauprozesses dienen, arbeiten mit pyramidalen Formen und zeigen, dass die Gewinnung von Kohle mit der Arbeit der Ameisen vergleichbar ist: Der Gewinnung von Kohle entspricht immer ein unterirdischer Abtrag von Material.

Mario Asef: Pyramid of Coal Consumption (2017). Zeichnung: Mario Asef.

Grafische Darstellungen dieses Prozesses zeigen eine invertierte Pyramidenform, an deren tiefster Stelle die Braunkohle liegt. Von hier aus wird der Brennstoff an die Oberfläche befördert, wo er sich – metaphorisch gesprochen – an die Spitze einer neuen pyramidalen Hierarchie setzt, denn all unsere Industrie, unsere Fortbewegung und unsere Lebensstandards hängen von der Energie ab, die sich aus dem Rohstoff gewinnen lässt. Diese bildet somit den Kulminationspunkt, in dem sich das gesamte globale Interesse bündelt.

Die eben gebrachte Skizze zeigt beispielhaft, wie sich ein solches Organigramm ausgestaltet: Jede einzelne Stufe des Organigramms nimmt an einem Prozess teil, an dessen Spitze das Ziel der Energiegewinnung steht und von hier auf alle Ebenen ausstrahlt. Es entsteht eine komplexe Informationsarchitektur, welche der in modernen Gesellschaften gegebenen Notwendigkeit entspricht, gezielte Beziehungen zwischen Daten herzustellen. Daher eröffnet gerade die verworrene Gemengelage innerhalb der Braunkohle-Diskussion einen geeigneten Ausgangspunkt, um mit Hilfe des Organigramms über Definitionen und Interaktion von Raum und Landschaft nachzudenken.

Woran ist die Realisierung des Pyramidenbaus gescheitert?
Prof. Dr. Ing. Klaus Jürgen Hünger begann mit einem Team von Studenten, das Material zu erforschen, doch sie säten erste Zweifel an dem Vorhaben, denn die großen Anteile an Wasser und giftigem Sulfat machen eine erfolgreiche Nutzung des Ockerschlamms als Baumaterial unwahrscheinlich. Allerdings schaltete sich im letzten Jahr der Ingenieur Helmut Ziehe ein und proklamierte, eine einfache Lösung für das Problem gefunden zu haben. Zum heutigen Zeitpunkt erscheint sein Vorhaben jedoch als nicht realisierbar, denn die Resultate der Analyse zeigen keine Veränderung der Eigenschaften des Materials.

Ursprünglich sollte zu diesem Projekt noch ein Film entstehen. Haben Sie den Filmplan ganz aufgegeben?
Nein, ich halte weiterhin daran fest, muss den Film aber wegen Covid-19 verschieben.

Erläutern Sie bitte das aktuelle Filmkonzept.
Das Filmprojekt setzt sich einerseits mit der industriellen Energiegewinnung und deren ökologischen Folgen auseinander, fängt andererseits aber auch ein, wie ein ganzes Dorf in Erwartung eines bald zu erbauenden Wahrzeichens in Dynamik gerät – angefacht durch die Intervention eines ideell überambitionierten Künstlers. Auf dessen persönliche Motivation, ein bedeutsames Werk zu schaffen, und auf die Hoffnung der Dorfbewohner, ein regionales Alleinstellungsmerkmal zu erlangen, treffen politische und ökonomische Interessen der Kooperationspartner. Diese entgegengesetzten Haltungen generieren ein turbulentes Eigenleben, welches das Projekt schlussendlich zum Scheitern bringt. Ich selbst nehme die Rolle des enthusiastischen Künstlers ein und werde somit neben meiner Regietätigkeit gleichermaßen zum Teil des dokumentierten Geschehens.

Sowohl Konsum der Landschaft als auch Der Pyramidenbau von Raddusch sind ökologische Kunstprojekte, die auf Umweltschädigungen – auf die „gigantische ökologische Katastrophe“ – aufmerksam machen und Energien für die Bewältigung der Probleme freisetzen wollen. Seit wann machen Sie Kunst dieser Art, und welche Rolle haben wissenschaftliche Erkenntnisse bei dieser Neuorientierung gespielt?
Meine Videoarbeit Crossfade (2012) erzählt die Geschichte zweier Invasionsbewegungen. Die Vereinnahmung Amerikas durch die Europäer wird in Bezug gesetzt zur Ausbreitung der argentinischen Ameise (Linepithema Humile) in Europa. Zu Beginn des 20. Jahrhunderts wurde sie durch Überseetransporte eingeschleppt; seitdem vernichtet sie die ansässigen Ameisenarten. Mit 6.000 km Länge hat sie die größte Superkolonie der Welt entlang der Mittelmeerküste von Norditalien durch Frankreich, Spanien, Portugal bis an die nordspanische Küste erschaffen. 90% der einheimischen Ameisenarten hat sie inzwischen ausgelöscht.

Die Recherchen für diese Arbeit zeigten mir, dass die Vereinnahmung Amerikas durch die Europäer und ihre brutalen Folgen für die indigenen Völker des amerikanischen Kontinents einen Wendepunkt in den betroffenen Ökosystemen darstellten. Das bedeutet aus meiner Sicht auch, dass bestimmte politische Aktivitäten, philosophische Überlegungen und wissenschaftliche Annahmen im Laufe der Geschichte ökologische Konsequenzen haben.

Seitdem haben alle meine Projekte eine ökologische Seite. Die Wissenschaft spielt dabei eine wichtige Rolle, denn aktuelle wissenschaftliche Erkenntnisse formieren in erster Linie unser Weltverständnis und prägen in zweiter Linie unsere Interaktionen mit unserer Umwelt.

Ihr 2018 entstandenes Projekt Kemmuna Nation steht offenbar auch in diesem Zusammenhang. Worum geht es hier?
Es handelt sich um ein fortlaufendes Projekt im öffentlichen Raum, das mit der Idee einer globalen Nation, zu der nichtmenschliche Entitäten gehören, spielt. In Übereinstimmung mit den Verfassungen der Republik Ecuador und Boliviens, die die Pachamama (Mutter Erde) als eine juristische Person mit eigenen Rechten und Pflichten gegenüber dem Staat anerkennen, erarbeitet Kemmuna Nation das Konzept einer Nation, in der die Interaktionen zwischen der Natur und den Menschen koordiniert werden. Menschen sind hier nicht Teil der Nation, sondern nur Verhandlungspartner. Um dies zu erreichen, muss man die Natur als einen politischen Akteur betrachten, der in der Lage ist, die Rechte der nichtmenschlichen Akteure, aus denen sie besteht, souverän zu verteidigen.

Mario Asef: St. Mary’s Tower (2018). Foto: Mario Asef.
Mario Asef: St. Mary’s Tower (2018). Foto: Mario Asef.

Wo haben Sie Kemmuna Nation verwirklicht?
2018 wurde ich von der FRAGMENTA Malta eingeladen, dieses Projekt auf der Insel Comino zu realisieren. Mehrere Gebäude wurden zur Nutzung bereitgestellt. Auf dem Programm standen eine Rede zur Unabhängigkeitserklärung, ein Vortrag über Blockchain – über fälschungssichere, verteilte Datenstrukturen, in denen Transaktionen in der Zeitfolge protokolliert, nachvollziehbar, unveränderlich und ohne zentrale Instanz abgebildet sind –, die Krypto-Währung Kemmuna Coin sowie eine kurze Tour durch das Flechten-Ökosystem von Comino. Auch eine interaktive Klanginstallation und ein Klangspaziergang wurden in der verlassenen Bäckerei von Comino präsentiert.

Jetzt die Bäckerei, vorher der Geologische Kuchen: Hat diese mehrfache Hinwendung zur kulinarischen Kultur des Menschen einen besonderen Grund?
Durchaus. Was wir essen, verlinkt uns mit dem Ort, an dem wir leben, und der ihn prägenden Kultur. In vielen meiner Arbeiten ist das Essen ein Synonym für Kulturelles: Es entwickelt sich von der abstrakten Idee über Kapital und Macht bis zum konkreten Anfassen, Kauen und Schlucken. Was man hinunterschluckt, ist nicht nur Brot z.B., sondern letztlich ein ganzes soziopolitisches System.

Welche weiteren Aspekte umfasst das Konzept?
Als Basis dient die mineralische Ebene, die durch ein unterirdisches Netzwerk von Mykorrhizapilzen mit verschiedenen Pflanzenarten verbunden ist. Dieses System erzeugt Nährstoffe für Insekten, Tiere und Menschen. Auf diese Weise und unter Berücksichtigung der Menge der Pflanzen, die von den Tieren und Insekten gefressen werden, erhalten Mykorrhizapilze einen Überblick über den Tier- und Pflanzenbestand (auch durch Kommunikation mit anderen Pilzen, die auf Tierleichen und Kot wachsen).

Wie können Pilze einen Überblick über etwas bekommen? Ist das eine Science Fiction-Annahme?
Ja, das ist spekulativ gesprochen und sehr vereinfacht. Ich weiß, es ist sehr heikel, z.B. Pilzen ein Bewusstsein zuzuschreiben, es erscheint aber nicht mehr so absurd wie vor 20 Jahren. Unser Verständnis der Wahrnehmung der Pflanzen erweitert sich rapide. Hier sogar in unterhaltsamen Form erklärt: https://www.youtube.com/embed/wXgvxooJaPE?feature=oembed

…und hier eine Studie über die Mykorriza Pilz-Wurzel-Symbiose.

Das Mykorrhizennetzwerk kann innerhalb meiner fiktiven Konstruktion das Leben auf dem Planeten verwalten, indem es Nährstoffe und Informationen über Kohlendioxid austauscht. Mit Hilfe von Flechten, die auch eine Pilzkomponente haben, kann Kemmuna Nation die Luftverschmutzung messen. Die nichtmenschliche Nation nutzt also Flechten als Biomonitore der Luftqualität. Die Luftqualität ist auch ein Faktor, um den Wert der Kemmuna Coin zu berechnen.

Die Flechten reagieren sehr empfindlich auf Veränderungen der Luftqualität. Viele Flechtenarten können auch in anderen Klimazonen leben, was die Untersuchung von Verschmutzungsgraden über große Entfernungen ermöglicht. Dieser Informationsstrom kann von Sensoren am Boden gemessen und von einem Zentralcomputer interpretiert werden, der über einen Algorithmus den Wert einer Kryptowährung bestimmt – so das Konzept. Diese neue Währung wird Kemmuna Coin genannt und von den Menschen zur Bezahlung von Transaktionen mit der Erde verwendet. Alle Rohstoffe, die die Menschen der Kemmuna Nation entnehmen, müssen mit Kemmuna Coin vergütet werden. Verstöße gegen das Gesetz werden ebenfalls mit Kemmuna Coin geahndet. Auf diese Weise können Verschmutzung und Ausbeutung der Natur Faktoren sein, die den Wert dieses Geldwechsels zwischen Mensch und Natur verändern. So konstituiert sich ein selbstreguliertes System, das auch den menschlichen Faktor des Systems einbezieht.

Mario Asef: Abandoned bakery (2018). Foto: Bettina Hutschek.
Mario Asef: Abandoned bakery (2018). Foto: Bettina Hutschek.

Hat es Inspirationsquellen für dieses Projekt gegeben?
Ja. In seinem 1991 erschienenen Buch Wir waren nie modern versucht Bruno Latour, die soziale und die natürliche Welt wieder miteinander zu verbinden, indem er argumentiert, dass die modernistische Unterscheidung zwischen Natur und Kultur verfehlt ist, denn Kultur sei eine der Ausdrucksformen der Natur. Er behauptet, dass wir unser Denken so modifizieren sollten, dass wir uns ein „Parlament der Dinge“ vorstellen, in dem Naturphänomene, soziale Phänomene und der Diskurs über sie nicht als separate Objekte betrachtet werden, die von Spezialisten untersucht werden müssen, sondern als Hybride, die durch die öffentliche Interaktion von Menschen, Dingen und Konzepten hergestellt und untersucht werden. Mittlerweile sind Begriffe wie „Biosemiotics“ oder „Dark Ecology“ gängig geworden.

Durch Latour und andere Autoren wie z.B. Humberto Maturana bin ich zu der Überzeugung gelangt, dass wir einen radikalen Plan benötigen, welcher der Natur – dem, was wir heute Natur nennen – eine Stimme innerhalb der Weltpolitik gibt. Technologisch sind wir zwar noch nicht so weit, aber die Konzepte sind immerhin schon da. Es ist der Zeitpunkt gekommen, an dem die Natur sich vom Menschen unabhängig erklärt. Die Kunst halte ich für ein geeignetes Medium, um die Menschen für ein solches neues Verständnis zu sensibilisieren.

Mario Asef, wir danken Ihnen für das aufschlussreiche Gespräch.

Kemmuna Nation

Fragmenta Malta

In line with the constitutions of the Republic of Ecuador and Bolivia that recognize Pachamama (Mother Earth) as a legal entity with its own rights and responsibilities relative to the state, Kemmuna Nation speculates with the idea of a global nation constituted by non-humans entities, which organize themselves creating their own economical and political system based on the structures of specific pre-existing interconnections between species.

In 2018 I was invited by FRAGMENTA Malta to present this project by taking over the island of Comino. Several buildings were put to use. The program included a declaration of independence speech, a lecture on Blockchain and Kemmuna Coin cryptocurrency, and a short tour of Comino’s lichen ecosystem. An interactive sound installation and a sound walk were presented in Comino’s abandoned bakery.

Abandoned bakery –sound installation–
Abandoned bakery –sound installation–
Abandoned bakery –sound installation–
Abandoned bakery –sound installation–
Abandoned bakery –sound installation–
Abandoned bakery –sound walk–

The foundation on which the system structures itself is played out on the mineral level contained in the soil, which is connected with different species of plants through an underground network of mycorrhizal fungi. This system generates nutrients for insects and animals, including humans. In this way and considering the amount of plants, which are being eaten by those, mycorrhizal fungi get an overview of the animal population (also by communicating with other fungi growing on animal corpses and feces).

Flag hoisting at Comino Hotel
Lichen
Martin Galea de Giovanni lecture about lichen’s network

Thus, the mycorrhizal network administrates life on the planet by exchanging nutrients and information through carbon dioxide. With the help of lichen, which has also a fugi component, Kemuna Nation can build biomonitors for air pollution. Many lichen species have large geographical ranges, allowing study of pollution gradients over long distances. This information torrent can be measured by sensors on the ground and interpreted by a central computer, which, through an algorithm, determines the value of a cryptocurrency.

Posters –view–
Posters –view–

This new currency is called Kemmuna Coin, and will be used by humans to pay transactions with the earth. All raw material taken by humans from Kemmuna Nation need to be retributory paid with Kemmuna Coins. Violations of law will also be charged in Kemmuna Coins. In this way pollution and explotation of nature can be a factor that altered the value of that monetary exchage between mankind and nature. Constituting so a self-regulated system, that also regulates the human factor of the system.

Terence Cassar lecture about Blockchain – Kemmuna Coin –

“In the age of the Anthropocene, the end is near. The ideal of a shared world no longer exists, political philosophy has lost its language, globalization is experiencing a negative reversal. Now, the earth starts fighting back. October 28th will be the date: nature declares its own independency. Plants, animals and minerals will unite to build the most powerful nation in the world, leaving behind times of plunder and exploitation through men. This will be the day that the world order will take a new shape. Join us to be witness of the birth of Kemmuna Nation.”

Kemmuna Nation –indepndence speech–
Kemmuna Nation

Watch the documentary about this project here:

Cenit

The video Cenit tells a love story that is a metaphor for the celestial moment when the sun casts no shadow. Spinoza’s Ethics and an archaeological examination of Aztec ruins serve as the point of departure for a theory of reality and emotions. In Asef’s view, reconstructing and representing real space in the mind draws on the same mental processes used for constructing the idea of love and happiness. Accordingly, wandering the earth induces an emotional experience that prompts the main character of Cenit to search for the geographical point of happiness.

The work was presented in 2018 at The Drawing Hub Berlin, Germany / Griffin Art Projects, Vancouver, Canada and Wildpalms, Düsseldorf, Germany.

single screen projection / duration: 11’ 54’’ min / system: HD Pal – Color / audio: Stereo Digital

Exhibition images by Achim Kukulies and Mario Asef

Cenit –installatoin view, wild palms, Düsseldorf
Cenit –installatoin view, wild palms, Düsseldorf
Cenit –installatoin view, The Drawing Hub, Berlin
Cenit –installatoin view, wild palms, Düsseldorf
Cenit –installatoin view, The Drawing Hub, Berlin
Cenit –drawing, mix media on millimetre paper
Cenit –drawing, mix media on millimetre paper
Cenit –drawing, mix media on millimetre paper
Cenit –video still–
Cenit –video still–
Cenit –video still–

VIDEO

download PDF – Cenit Blatt

Konsum der Landschaft

Spreewald Brandenburg

Under the catchword “consumption” artist Mario Asef developed for the Aquamediale 11 two projects dealing with processes of landscape usage and transformation. On the Lübbener Schlossplatz he appropriates an area of the park in order to set up his own brick-making production. He mixes local iron-ocher mud with cement for the production of bricks and tests the results for sustainability of use in building construction.

The focus of the work was on the so-called “Brown Spree”: As a late consequence of coal mining, iron hydroxide dissolves from the soil and colors the Spree river in ocher of varying intensity. Fish, plants and microorganisms die off. Every day about 8.5 tonnes of iron oxide mud (ocher mud) flows into the Spree river, while it is not yet clear how large the environmental damage will be for the ecotourism region. In a daily Sisyphean work excavators clean the waterways while the material accumulates unused at their edges.

Konsum der Landschaft –infographic, brick production–
Konsum der Landschaft –installation view, brick production–
Konsum der Landschaft –installation view, brick production–
Konsum der Landschaft –installation view, brick production–
Konsum der Landschaft –installation view, brick production–
Konsum der Landschaft –installation view, brick production–

Parallel to this, Mario Asef developed in cooperation with Edelmond Chocolatiers GmbH a “geological cake” that reproduces the specific geological composition of the Spreewald soil in chocolate, vanilla, marzipan, and icing. The cake is been served to customers at Edelmond’s restaurant during Aquamediale 11 festival.

Konsum der Landschaft –infographic, Geological Cake–
Konsum der Landschaft –Geological Cake–
Konsum der Landschaft –Geological Cake–
Konsum der Landschaft –Geological Cake, workshop at Luckau’s primary school–
Konsum der Landschaft –infographic of coal mining pit with accumulation of iron hydroxide on the base level.
Konsum der Landschaft –preparing the ground–

Berliner Zeitung – Die Lausitz als Kuchen (German) PDF

See also the related project Der Pyramidenbau von Raddusch